¿Por qué una dieta baja en grasa?

Como un primer paso en la adopción de una dieta baja en grasas es imprescindible para optar de inmediato para una comida sencilla o procesados científicamente, lo que mantiene las propiedades nutritivas, pero contienen menos grasa. Aquí se pueden mencionar los productos lácteos bajos en grasa, quesos, mantequilla, carnes magras, especialmente el pollo y el pescado. Después de la adopción de estas medidas, una mejora evidente de la salud general y el bienestar se puede observar.

Una dieta baja en grasas requerirá no sólo la eliminación de un porcentaje importante de grasa en el menú del día, pero el uso de las técnicas de cocción más saludables como la cocción al vapor, horno o hervir los alimentos. Las parrillas de carne o de verduras no deben ser evitados y debe haber utensilios de cocina de calidad, con el fin de garantizar nuestra seguridad. Las salsas se debe dar más atención, prefiriendo siempre los adobos y otros "frío" en lugar de salsas salsas frito o compuesto.

Para la preparación de ensaladas y otras recetas que requieren una contribución de algunos aceites vegetales, las cantidades de aceite y las hierbas naturales deben ser cuidadosamente dosificada para lograr un sabor delicioso, al tiempo que reduce la cantidad de aceite introducido en la preparación de la receta. El aceite de oliva es conocido por ser el aceite vegetal más saludable, por lo que prefiere, pero el aceite de girasol no es necesariamente perjudicial para la salud si se utiliza en pequeñas cantidades.

Una dieta baja en grasa se basa en el aumento de la ingesta de granos enteros, verduras, frutas y verduras, pero también en la introducción prudente de diversas grasas en su dieta, tales como los de frutos secos, nueces y semillas, aceites vegetales producidos por las tecnologías de salud , pescado o de soja comidas y productos de soja.

La dieta baja en grasas se recomienda sólo para los adultos, que pueden llevar una vida sana comiendo como esta, pero los niños tendrán que incluir en su dieta cantidades moderadas de grasas saturadas como la carne, lácteos grasos y la mantequilla. Además, una parte especial de la dieta es la ingesta diaria de sal y azúcar, así como el aumento en el consumo de líquidos, especialmente el consumo de agua natural.